Cómo cambiar la goma de la lavadora
¿Has notado problemas como fugas de agua, dificultades en el sellado o acumulación de moho en tu lavadora?, en este post te ayudamos a abordar varios de los problemas más comunes de la goma de la lavadora de manera efectiva. ¡Prepárate para recuperar el rendimiento óptimo de tu electrodoméstico!
¿Por qué es importante la goma de lavadora?
Es un elemento que desempeña un papel fundamental en la lavadora, este componente es esencial para prevenir filtraciones durante el ciclo de lavado, funciona como un sello hermético, evitando que el agua escape y cause daños.
- Evita daños por fugas: Las fugas de agua pueden provocar daños en el suelo, las paredes y otros electrodomésticos cercanos. Además, el agua no controlada puede penetrar en las partes internas de la lavadora, causando daños a largo plazo, lo que requerirá una reparaciones mucho más costosas.
- Mantiene el rendimiento de la lavadora: el correcto funcionamiento de la goma también tiene un impacto directo en el rendimiento de la lavadora. Un sellado ineficaz puede afectar la capacidad de la máquina para retener agua durante los ciclos de lavado, lo que dará a lugar a una pérdida de eficiencia energética. Además, la presencia de agua no deseada en áreas inapropiadas puede generar corrosión y daños en otras partes del electrodoméstico.
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Protege frenta a la acumulación de residuos: La goma de la lavadora actúa como una barrera esencial contra la acumulación de residuos, moho y suciedad. Un sellado adecuado previene la entrada de estos elementos en las áreas internas de la lavadora, lo que no solo mantiene la máquina limpia sino que también contribuye a la prevención de olores desagradables y el desarrollo de moho.
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Evita dañar otras partes de la lavadora: un sellado deficiente puede provocar filtraciones internas, lo que puede dañar otras partes de la lavadora. El agua no controlada puede afectar a componentes eléctricos, causando cortocircuitos o daños irreparables. La goma, al mantener un sellado hermético, protege eficazmente contra estos riesgos.
¿Cómo cambiar la goma de la lavadora? explicado paso a paso
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Herramientas necesarias: antes de comenzar el proceso de cambio, asegúrate de tener todas las herramientas necesarias a tu disposición, pueden incluir destornilladores, alicates y, por supuesto, la nueva goma de repuesto compatible con el modelo de tu lavadora.
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Desconexión y apagado: para una mayor seguridad, desconecta la lavadora de la corriente y asegúrate de cerrar el suministro de agua, este paso evitará accidentes durante el procedimiento y garantizará un entorno seguro para trabajar.
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Extracción de la goma antigua: procede a retirar la goma antigua siguiendo las instrucciones del fabricante, este proceso puede variar según el modelo, pero generalmente se realiza desencajando o desatornillando la goma antigua de su posición.
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Limpieza de la zona de sellado: antes de colocar la nueva goma, haz una limpieza exhaustiva de la zona de sellado, retira cualquier residuo o acumulación de suciedad que pueda haberse formado, esto hará que el ajuste sea perfecto, mejorando así la eficacia del sellado.
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Instalación de la nueva goma: coloca la nueva goma en la posición adecuada, asegúrate de que esté alineada y bien sellada para evitar futuras fugas. Presta especial atención a cualquier instrucción específica relacionada con el montaje.
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Verificación y prueba: después de instalar la nueva goma, verifica que esté en su lugar adecuado, haz una prueba de lavado para asegurarte de que no haya fugas y de que la goma cumple su función correctamente. Haz los ajustes que consideres necesarios para garantizar el sellado hermético.
Señales de desgaste en la goma de la lavadora
1. Fugas de agua: una de las señales más evidentes de desgaste en la goma de la lavadora son las fugas de agua. Si notas que después de cada ciclo de lavado hay charcos alrededor de la lavadora, es probable que la goma esté dañada o desgastada. Las fugas pueden deberse a grietas, roturas o un mal sellado.
2. Problemas de sellado: como te comentamos antes, un sellado deficiente es otra señal clara de que la goma de la lavadora puede estar desgastada. Si observas agua entre la puerta y el tambor de la lavadora durante o después del lavado, puede que la goma ya no está sellando de manera efectiva. Esto puede deberse a deformidades, pérdida de elasticidad o daño estructural.
3. Moho o acumulación de suciedad: el desgaste de la goma también puede manifestarse en la aparición de moho o acumulación de suciedad. Si notas manchas oscuras o áreas de suciedad persistente en la goma, esto puede indicar que ha perdido su capacidad de resistir la acumulación de residuos. Además, el moho puede afectar la eficacia del sellado y causar olores desagradables.
4. Deformaciones visibles: inspecciona la goma en busca de deformaciones, si encuentras áreas donde la goma parece estar desgarrada, agrietada o deformada, tienes ante ti una clara señal de que ha llegado el momento de reemplazarla. Las deformidades afectarán negativamente el sellado y, por lo tanto, al rendimiento de la lavadora.
5. Ruidos inusuales durante el lavado: un síntoma menos evidente pero igualmente significativo del desgaste puede ser la generación de ruidos inusuales durante el lavado. Esto puede deberse a un sellado ineficaz que permite la entrada de agua en áreas no deseadas, causando fricción y ruidos molestos.
En resumen, la goma de la lavadora no es simplemente un componente secundario; es esencial para el funcionamiento óptimo, la eficiencia y la seguridad de la lavadora. Mantenerla en buen estado, cambiarla cuando sea necesario y realizar un mantenimiento adecuado son pasos cruciales para asegurar un rendimiento duradero y eficiente de tu lavadora.